Papeles del Psicólogo, 1982. Vol. (6).

Sergio García-Reyes

P.C.E

La integración de las prestaciones sanitarias en salud mental en el sistema público es, para el Partido Comunista, uno de los aspectos más urgentes junto a la mejora de la atención primaria en la próxima legislatura.

El PCE propone que se dé prioridad al estudio y aprobación de una Ley de Sanidad que incorpore, entre otros, los siguientes aspectos:

1. Organización unificada y descentralizada del sistema sanitario público -Servicio Nacional de Salud- que atienda a todos los ciudadanos, gratuitamente, con funciones preventivas, de promoción de salud, asistenciales y de rehabilitación.
2. A financiación correrá a cargo del estado, estableciéndose para ello un Fondo Sanitario Nacional que incorpore recursos de las distintas Administraciones Públicas. La Seguridad Social, gradualmente, dejara de financiar la Sanidad potenciándose por otra parte los recursos del Estado, a través de la implantación del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA).
3. La salud mental deberá ser garantizada con actuaciones integradas en el sistema sanitario público, adecuadamente territorializados. Habrá que poner el acento en la atención primaria -centros de salud-. Lo ideal es tender a la asistencia en régimen de hospitalización en los casos que lo requieran en Hospitales General aunque habría que potenciar las experiencias positivas generadas a partir de Diputaciones y Ayuntamientos, adecuadamente integradas.
4. El psicólogo debe incorporarse no solo a los servicios específicos de salud mental -Hospitales psiquiátricos, unidades de psiquiatría de Hospitales Generales y programas de salud metal en atención primaria- sino también en otras actividades sanitarias participando en los diversos programas que puedan implantarse.
5. El psicólogo debería incorporarse en las plantillas institucionales al igual que el médico previo período de aprendizaje clínico, con responsabilidad gradual, contrato de trabajo y remuneración adecuada. Sistema de residencia que deberá tener una rotación por diversos servicios y por centros de atención primarios.

La mayor prioridad, para el PCE, en el sistema educativo es la potenciación de la enseñanza pública de manera que pueda llegar a todos los escolares que lo deseen a la vez que abra que mejorar su calidad.

Consideramos que la ciencia psicológica debe incorporarse al contenido y al diseño de los programas de educativos jugando, en este objetivo, un importante papel los psicólogos que deberán asesorar convenientemente a los maestros y a los pedagogos.

Por ello, el PCE propone la incorporación de los psicólogos a través de gabinetes o departamentos en la escuela pública con funciones fundamentales de prevención de los diferentes problemas que surgen en el medio escolar y que en definitiva colaboren en elevar la calidad de enseñanza.

La incorporación de los psicólogos la planteamos de manera institucional con un sistema de selección y de relaciones laborales equivalente al del profesorado.

En la gestión de la enseñanza, al igual que en la sanidad y en los servicios sociales defendemos una unificación de las competencias públicas con un papel relevante de las Comunidades Autónomas y Ayuntamientos que facilitan el enfoque comunitario, la gestión más ágil y la participación ciudadana. La educación a deficientes y minusválidos psíquicos y físicos, salvo para deficientes profundos que proponemos centros públicos especiales, la planteamos integrada en la enseñanza normal, con programas específicos adecuados a cada tipo de minusvalía y con él apoya a los maestros de personal técnico especializado que seguirá el desarrollo de los programas.

Las líneas maestras que defiende el PCE en este área son las siguientes:

1. Desarrollar una política social por el Estado que evite la marginación e integre plenamente a los sectores más desprotegidos, hoy marginados. Ello comporta una atención preferente a minusválidos y deficientes que permita su incorporación al sistema general de enseñanza y al medio laboral. Igualmente a la tercera edad deben potenciarse las aciones sociosanitarias que les permitan mantenerse integrados en su medio evitando la segregación.
2. Financiación por el Estado a sus diversos niveles de los Servicios Sociales básicos y suficientes que precisan los ciudadanos. La gestión deberá recaer en Ayuntamientos y la coordinación y planificación en las Comunidades Autónomas.
3. Los servicios sociales deben implementarse mediante programas desde centros de base ubicados en los distritos y desarrollados por equipos multidisciplinarios.

El principal problema para los psicólogos y para el conjunto del país es el paro. Para mejorar la situación actual el PCE propone las siguientes medidas:

1. Creación de un millón de puestos de trabajo. Una estimación para los psicólogos en las diferentes medidas que proponemos en las áreas educativas de salud y de servicios sociales lo que supone la creación de 10.000 puestos de trabajo en el área pública.
2. Modificación de aspectos regresivos del Estatuto de los Trabajadores y de la Ley General del Empleo que permitan asegurar, hacer más estable el empleo y en su caso mejor protección a los parados ampliando la prestación y e tiempo de percepción del seguro de desempleo.
3. Para fomentar el primer empleo proponemos la exención del pago del 75 % de las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social para los trabajos que tengan una duración no inferior a doce meses. Asimismo los contratos en prácticas mediante la regulación y el desarrollo pleno de programas de residencia para el psicólogo -PIR- pueden ayudar a los postgraduados a abrirse camino.
4. En todo caso la creación de empleo y la planificación de las necesidades de profesionales en diversas áreas en función de las demandas de servicios deben confluir a medio plazo en hacer realidad el lema "SALUD Y EMPLEO PARA TODOS EN EL AÑO 2000".